Yoga para principiantes
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La Cara de Vaca mejora la flexibilidad de los hombros y favorece una buena postura. Este ejercicio de yoga es especialmente beneficioso para las personas que pasan muchas horas delante del ordenador y han desarrollado cifosis (redondeo de la parte superior de la espalda).
La postura del arco es una postura intensiva que se realiza en no más de 10-20 segundos para principiantes. Este ejercicio mejora la flexibilidad de la columna vertebral, así como la fuerza de la columna, las piernas y los brazos. También ayuda a reducir el exceso de grasa abdominal.
Nacida en una familia jainista donde el yoga ha sido el modo de vida durante cinco generaciones, mi viaje formal por el yoga comenzó a los ocho años en una escuela védica de la India. Allí recibí una sólida formación en escrituras antiguas, como los Vedas, los Upanishads, el Bhagavad Gita y los Yoga Sutras (por nombrar algunos).
¿Cuál es la mejor práctica de yoga para principiantes?
Hatha Yoga
Entre los estilos de yoga, éste es el más clásico y popular en Occidente. Con menos posturas y más ligero, es adecuado para principiantes. Trabaja el equilibrio entre el cuerpo y la mente, así como la respiración.
¿Se puede practicar yoga solo?
¿Se puede practicar solo? Según Daniel, las prácticas se pueden hacer en solitario siempre que ya se haya tenido alguna noción de la práctica cara a cara. “Les explico: es importante que hagan las posturas correctamente, de lo contrario pueden tener pérdidas. Por lo tanto, la orientación es fundamental.
¿Cuánto tiempo hay que permanecer en cada postura de yoga?
Una permanencia muy razonable en una āsana de fuerza, por ejemplo, es de un minuto. Una buena permanencia en una postura de estiramiento no debe ir más allá, ni ser inferior a 30 segundos. Las posturas de estiramiento pasivo, siempre que las articulaciones estén firmes y bien protegidas, pueden realizarse durante más tiempo.
Posturas de yoga por parejas
Para responder a esta pregunta, es importante comprender el origen del yoga. Desarrollado hace unos 5.000 años, el yoga es una antigua práctica india que se basa en los cuatro objetivos principales que guían la vida de todos los seres humanos.
El tercer objetivo es mucho más complejo. Se trata del dharma, que, en pocas palabras, indica el conjunto de principios y valores que rigen la vida de una persona, de modo que sus actitudes le permitan realizarse, pero sin perjudicar al prójimo en el proceso.
Pero, ¿qué tiene esto que ver con el yoga? Según esta antigua práctica, el sufrimiento es el resultado de un desequilibrio entre el ser humano y el mundo, que causa sufrimiento e impide alcanzar estos cuatro objetivos.
Y de este complejo pensamiento surgió el Yoga, una palabra que significa literalmente “unir o conectar” e indica la práctica de una serie de movimientos y pensamientos que permiten conectar el cuerpo, la mente y la energía.
Al contrario de lo que mucha gente piensa, mantener las posturas de yoga de forma correcta y equilibrada exige mucho de tu cuerpo y de tu mente. Créeme: mantener el cuerpo tonificado y quieto, especialmente durante las posturas más avanzadas, puede ser todo un reto.
Ejercicios de yoga para principiantes
El Ashtanga Yoga es un sistema de yoga introducido en Occidente por Sri K Pattabi Jois, una de las figuras más influyentes del mundo del yoga. Es una clase intensa, ideal para los que les gusta el movimiento y los retos.
Sin embargo el yoga se puede practicar en cualquier lugar, como playas, campos e incluso en casa y por eso hemos enumerado aquí algunos vídeos y libros que pueden ayudarte a seguir tu camino en la práctica del yoga.
El maestro indio era hijo y alumno de Sri Tirumalai Krishnamacharya, el maestro de yoga más renombrado de los tiempos modernos, cuyas enseñanzas se basan en la idea de que la práctica del yoga debe adaptarse continuamente a cada tipo de persona.
108 posturas de yoga – (pdf)
Lo importante es desarrollar nuestra agudeza para comprender lo que le ocurre al niño. Puede que estén cansados, que hayan tenido un desencuentro con alguien antes de la clase, que tengan hambre, en fin, que haya ocurrido algo y el niño no tenga ganas de participar.
Empecé a enseñar a niños, pensando que debían aprender de forma similar a los adultos. Un día estaba con ocho chicas en mi espacio de Yoga. Mientras buscaba mi cuaderno, las niñas cogieron mi canga, que era amarilla, y la de otro niño, que era azul. Con los yugos hicieron un cielo con un sol y me dijeron: “Maestro, ¿cómo vamos a saludar al sol sin el sol? Ahora sí, tenemos el cielo y el sol y podemos saludarlo”.
Ese fue el día que tuve un clic. Me desperté y pensé: “Tengo que dejarlo todo y cambiar mis lecciones…”. Realmente me detuve e hice un gran descubrimiento: tengo que tener un método creativo. En cuanto llegué a casa, muy motivada por este nuevo descubrimiento, empecé a reformular mis clases para hacerlas más atractivas y creativas para los niños.